Este enero, mientras muchos corredores en Sudamérica enfrentan olas de calor, es momento de reflexionar sobre la resistencia extraordinaria de los participantes del 'Polo de Frío Oymyakon', catalogada como la "maratón más fría del mundo". En la última edición, 38 valientes corredores desafiaron las extremas condiciones invernales de Siberia para completar la hazaña.
La carrera, que tiene su epítome en la helada ciudad de Oymyakon, conocida como el lugar habitado más frío del mundo, se llevó a cabo entre hielo y nieve, desafiando temperaturas que rondaban los impactantes -55 grados centígrados. Mientras que en Sudamérica nos refugiamos del calor, en Siberia, estos intrépidos corredores, en su mayoría rusos locales, se enfrentaron a un clima implacable.
El ganador indiscutible de esta gesta congelada fue Konstantin Dragunov, un estudiante de 24 años con una marca personal impresionante de 1 hora y 9 minutos en media maratón. Cruzó la línea de meta en asombrosas 3 horas y 7 minutos, demostrando una resistencia admirable frente a las condiciones extremas.
El evento no solo abarcó la maratón completa, sino también opciones más cortas de 21K, 10K y 5K para aquellos que no se atrevían con el recorrido completo. Entre las experiencias compartidas, Alisa Matveeva, finalista de la 21K, relató: "El hielo en los ojos fue muy molesto; fue una experiencia aterradora en momentos. La mitad de la carrera la corrí prácticamente en frío, sin calentar los músculos, luego en la segunda parte fue mejor".
Mientras en Sudamérica disfrutamos del calor, estas historias nos recuerdan la diversidad de desafíos que enfrentan los corredores alrededor del mundo. Celebramos el espíritu inquebrantable de aquellos que buscan superar los límites, ya sea bajo el sol abrasador o en los extremos gélidos de Siberia. ¡Sigue corriendo, sin importar el clima!